Ya casi llegas (y no te has dado cuenta)

Compartir:

Ya casi llegas (y no te has dado cuenta)

En un viaje familiar mientras conducía comencé a pensar en la pereza de tener que manejar durante más de 10 horas seguidas si es que quería llegar pronto. Los primero minutos son los más largos, pareciera que ya pasaron las horas pero estás viendo constantemente el reloj y solo avanzan unos cuantos minutos.

El cansancio sumado al estrés del viaje me ponían a cuestionarme en sí lo mejor era arrepentirme y regresarme por el camino que llevábamos, al fin y al cabo era menos el tiempo que tardaríamos en regresarnos que en llegar finalmente pero sin darme cuenta duré horas dándole vueltas a esta situación que cuando lo hice, ya había avanzado más de la mitad del camino.

¿Cuántas veces no hemos estado en esta situación? Empezando un negocio pero mejor dejarlo a un gran avance de camino; abandonar la licenciatura que empezamos y que estuvimos a punto de terminar; gastarnos los ahorros justo antes de llegar a nuestro objetivo y más situaciones como esta.

Tal vez te encuentras como yo cuestionándote si estás en el camino correcto, has pasado semanas, meses, incluso años pensando en rendirte y darte por vencido que no te has dado cuenta que estás a punto de llegar a la meta. Hoy quiero decirte que no te rindas, ya casi llegas.

Los sueños y anhelos que Dios puso en tu corazón están por florecer, tal vez aún no los ves pero conforme te acerques verás en el horizonte aquello que tanto estabas esperando. No aceleres, disfruta. Disfruta el proceso, admira aquello que está por llegar porque te ayudará a valorar el camino que has dejado atrás.

He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad.

-Isaías 43:19

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *